La muerte

Privados del mundo, recorriendo nuestras ilusiones nos encontramos en carceles de barrotes irrompibles que limitan toda libertad. Nos creemos ganadores cuando tenemos todo por perder, todo por ganar sin premios que compencen nuestro esfuerzo. Vivimos en las fantasias que somos capaces de procrear, desde su inicio hasta su fin. Huimos de la realidad porque le tememos a la misma, a las desiluciones, al rencor, al odio que podemos provocar en el otro, a la venganza, a la vida. Nos atamos en un mundo de novelas que al mismo tiempo se envuelven con los pensamientos de otros. Me cuesta creer que tarde o temprano se me va a terminar el tiempo para seguir imaginando. Me cuesta entender porque todo tiene un final. Nose como enfrentar que todos, en algun momento, vamos a morir.